Una llamarada
Un fosforo que se enciende
Es una chispa que prende un fuego
El fuego eterno
Uno que no hay agua que lo apague
que no hay brisa que lo sople
Dos corazones como una laguna de fuego, da calor.
Calor que en su momento arde y da frutos
Chispas que se mantienen con la inicial, sin esperar nada del resto
Como en la vida real, todo suele suceder
Cuando el amor parece haberse apagado, la brasa continua encendida y lo que se dice de hechar leña al fuego, es lo que haces continuamente
Mantenemos los ojos abiertos, las almas despiertas, las manos juntas, fuertes, apretan, no cesan y no se cansan...
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